La búsqueda del Real Madrid, líder de LaLiga, de ampliar su récord con el título número 36, cobró impulso después de que Jude Bellingham anotara un gol en el tiempo añadido para asegurar una remontada por 3-2 sobre el FC Barcelona el domingo.
El Barça se adelantó en el minuto seis cuando Andreas Christensen cabeceó tras un córner después de que el portero del conjunto merengue Andriy Lunin no lograra despejar el centro desde su área chica.
Vinicius Jr igualó 12 minutos después de penalti tras una falta contra Lucas Vázquez dentro del área.
El Real dominó la segunda mitad, pero desperdició varias oportunidades y permitió que el suplente Fermín López volviera a darle ventaja a los visitantes en el minuto 69 con un rebote, pero el Real contraatacó con una volea de Lucas Vázquez cuatro minutos después.
El Real Madrid siguió presionando para conseguir otro gol y su perseverancia dio sus frutos en el tiempo añadido cuando Vázquez corrió por el canal derecho y centró a Bellingham, quien logró el gol de la victoria.
La victoria del Real Madrid en el Clásico (cuarta consecutiva ante el Barça) sentenció un campeonato que el club merengue podría celebrar el cuatro de mayo, en el mismo Bernabéu y frente al Cádiz, mientras el Barcelona, derrumbado en una semana que comenzó aspirando a todo y cerró hundido en la depresión, deberá aún confirmar su segunda posición para no perder plaza en la próxima Supercopa de España.
Real Sociedad, Cádiz, Granada, Alavés, Villarreal y Betis son los seis rivales que le quedan por delante al equipo de Ancelotti, que enlazando en el Clásico su quinta victoria liguera y manteniéndose invicto desde septiembre ha convertido el campeonato en un aplastamiento. Los números del Madrid son de tal magnitud que sus 81 puntos es el mejor guarismo consumidas 32 jornadas desde 2018 y habría que retroceder hasta 2013 para encontrar, nuevamente, un líder con mayor puntuación.
En ambas ocasiones aquel líder, y a la postre campeón, era el Barça. A los mandos de Tito Vilanova primero y de Ernesto Valverde después dominó el campeonato con una magnificencia que ahora se observa en este Real Madrid, solo superado a estas alturas por el de la temporada 2011-12 y que cerró el curso, bajo la dirección de José Mourinho, con 100 puntos.
