El ciclo de LeBron James con los Lakers de Los Ángeles parece acercarse a su fin con un balance que divide opiniones entre fanáticos y analistas. Aunque logró conquistar un campeonato en 2020 durante la temporada de la “burbuja”, su paso también ha estado marcado por lesiones, salidas prematuras en playoffs y temporadas decepcionantes. Su contrato le permite decidir si continúa para la campaña 2025-26, con una opción de jugador valorada en 52.6 millones de dólares.
Desde su llegada en 2018, LeBron ha protagonizado momentos históricos como superar a Kobe Bryant y Kareem Abdul-Jabbar en la tabla de anotadores de la NBA, y convertirse en el primero con al menos 10 mil puntos, rebotes y asistencias. No obstante, de las siete temporadas con el equipo, en cinco los Lakers fueron eliminados en primera ronda o ni siquiera clasificaron. Su liderazgo y cifras individuales han sido brillantes, pero el éxito colectivo ha sido irregular.
El presente del equipo, sumado a su edad y las decisiones que pueda tomar sobre su contrato, colocan a la franquicia en una encrucijada. Mientras una parte de la afición recuerda con gratitud el título conseguido, otros cuestionan los resultados globales de su era en Los Ángeles, donde el brillo personal de LeBron no siempre se tradujo en victorias significativas para la institución.
