Las autoridades de República Dominicana han expresado preocupación por la posible circulación de una nueva droga sintética conocida como «Tussi» o «cocaína rosa». Esta droga, originaria de Colombia, se está expandiendo por América Latina y el Caribe, y su consumo representa serios riesgos para la salud, incluyendo daños cerebrales, trastornos psiquiátricos y efectos psicoactivos impredecibles.
El Tussi, a pesar de no contener cocaína, recibe su nombre por el color rosa de su presentación. Los especialistas advierten que afecta el sistema nervioso y cardiovascular, provocando desde euforia y alucinaciones hasta ansiedad severa y psicosis. Las redes de narcotráfico en Colombia, México y Venezuela son responsables de su distribución en la región.
La preocupación no solo radica en los efectos dañinos sobre la salud, sino también en cómo esta droga ha dinamizado el mercado ilícito de drogas, contribuyendo al aumento de la criminalidad y la violencia. Las autoridades están intensificando labores de inteligencia y vigilancia en centros de diversión para frenar su consumo, mientras recomiendan políticas de prevención y control más estrictas.
