La Fiscalía del Distrito Nacional ha aclarado su enfoque respecto al uso de la prisión preventiva, asegurando que esta medida se solicita únicamente en casos de extrema gravedad, como homicidio y violación sexual, especialmente cuando el imputado no puede justificar medidas menos severas.
La titular de la fiscalía, Rosalba Ramos Castillo, destacó que, si bien han pedido prisión preventiva en casos de narcotráfico, cada situación es evaluada de manera individual, y no todos los casos reciben el mismo tratamiento.
Desde el inicio de la pandemia, la Fiscalía ha optado por medidas de coerción distintas a la prisión preventiva ante el Juzgado de Atención Permanente del Distrito Nacional.
En lo que va del año 2024, tanto en el nuevo modelo como en el tradicional, se ha observado un aumento significativo en la cantidad de presos preventivos, alcanzando un total de 15,717, lo que representa un aumento del 59.54%. Esta cifra ha generado preocupación entre juristas y catedráticos universitarios, quienes instan a jueces y fiscales a evitar un uso excesivo y abusivo de la prisión preventiva.
El director de la Oficina Nacional de Defensa Pública, Rodolfo Valentín Santos, ha calificado esta situación como «alarmante», señalando que el 60 por ciento de los reclusos están a la espera de una condena definitiva, lo que contribuye al hacinamiento en las cárceles del país.
El exceso en el uso de la prisión preventiva, la cual es la medida de coerción más severa, ha sido criticado por convertirse en una especie de condena anticipada, además de contribuir al problema de sobrepoblación carcelaria en la República Dominicana.
