La moda dominicana se despide con nostalgia de Farah Cabrera, una figura pionera que marcó un hito en el mundo de la elegancia y el diseño en República Dominicana. Su partida deja un vacío en el sector, pero su legado perdurará por siempre.
En el año 2018, Farah Cabrera expresó a medios de comunicación su eterno compromiso con la moda, asegurando que moriría con una aguja en las manos. Hoy, su legado trasciende, recordándola como una mujer apasionada que nunca se retiró de su arte.
Sus colegas y amigos, como Isabel Reynoso, Marisol Henríquez y Giannina Azar, resaltan la importancia de su contribución al sector. Reynoso la describe como una gran exponente que enriqueció la elegancia de las damas dominicanas, mientras que Henríquez la reconoce como una de las mujeres que más distinción aportó a la moda nacional.
El fallecimiento de Cabrera deja un profundo pesar en la comunidad de la moda. Giannina Azar la recuerda como un ejemplo de elegancia y profesionalismo, instando a las nuevas generaciones a seguir su legado y honrar su memoria.
Farah Cabrera partió en la noche de ayer. Su velorio se llevará a cabo en la Funeraria Blandino a partir de las 4:00 de la tarde de hoy, y será sepultada mañana a las 12:30 en el cementerio de Máximo Gómez.
Sus inicios se remontan al año 1968, cuando comenzó a destacarse en desfiles de moda organizados por el Ministerio de Turismo. Desde entonces, su nombre se convirtió en sinónimo de elegancia y estilo, marcando el camino para las generaciones futuras en la industria de la moda dominicana.
