En el sector El Hoyo de La Mina, en Los Guaricanos, Santo Domingo Norte, la calle Hermanas Mirabal se convierte en un río con cada aguacero, generando grandes estanques de agua que permanecen por semanas frente a las viviendas. Esta situación afecta directamente a unas 50 casas con aguas contaminadas, larvas y basura, sin que las autoridades tomen medidas para resolver el problema.
Pedro Junior de los Santos, residente de la zona, explicó que todas las aguas del sector desembocan en esta calle, y los mosquitos, la humedad y las posibles enfermedades causadas por estas aguas residuales son una preocupación constante para los vecinos. Los residentes deben usar botas de goma o levantar sus pantalones hasta las rodillas para cruzar los charcos de agua, pidiendo agua limpia a sus vecinos para lavarse los pies después.
De los Santos destacó la necesidad urgente de arreglar la calle para evitar la proliferación de mosquitos y los riesgos de enfermedades. Los niños juegan en el agua estancada y los adultos deben cruzar esta contaminación para realizar sus actividades diarias. Elexido Fría, otro vecino, expresó su frustración con la Corporación de Acueductos y Alcantarillados de Santo Domingo (CAASD), que ha prometido mejoras pero solo ha realizado mediciones.
Fría también relató cómo, después de las lluvias del 18 de noviembre de 2023, tres casas se inundaron completamente, y fue con la ayuda de vecinos que se logró rescatar a 11 personas que estuvieron en peligro de ahogarse. María Elena Garabito, que tiene un pequeño negocio de uñas en su casa, mencionó que aunque no está directamente afectada por las inundaciones, sufre las consecuencias de los mosquitos, enfermedades y el mal olor provenientes del agua estancada.
Los vecinos piden al gobierno y a las autoridades locales una solución urgente para mejorar las condiciones de la calle Hermanas Mirabal y prevenir futuros problemas de salud y seguridad.
