
Las autoridades desmantelaron una red de estafa inmobiliaria que operaba a través de la empresa Novasco Real, engañando a más de 120 personas, entre dominicanos y extranjeros. Según la fiscalía, la estructura delictiva captó a sus víctimas con proyectos ficticios y utilizó la franquicia de RE/MAX para generar confianza. En el operativo denominado «Caso Guepardo», se incautaron propiedades, vehículos de lujo y documentos vinculados al fraude, que habría generado más de 18 millones de dólares en ganancias ilícitas.
El ministerio público solicitó prisión preventiva para Marisol Nova Nolasco y Rocío del Alba Rodríguez de Moya, señaladas como líderes de la estafa, mientras que otros dos implicados, Yves Alexandre Giroux y Loany Lismeiry Ortiz Nova, permanecen prófugos. La red promovía proyectos inexistentes como «Romana Victoriana Residences» y «La Altagracia Victoriana Residences», captando clientes a través de reuniones virtuales y publicidad engañosa.
Ante el aumento de estos delitos, el abogado César Amadeo Peralta reiteró el llamado a aprobar el nuevo Código Penal, que aumentaría la pena máxima por estafa de dos a 20 años de prisión. Asimismo, recomendó a los compradores verificar la legalidad de los proyectos antes de invertir y consultar con expertos en derecho inmobiliario.