
La final de la NBA 2024 se definirá este domingo con un séptimo y decisivo partido entre los Indiana Pacers y el Oklahoma City Thunder, marcando la vigésima ocasión en la historia de la liga que el campeonato se decide en el máximo de juegos. El encuentro se disputará en Oklahoma City, donde el equipo local espera hacer valer su ventaja histórica, ya que los conjuntos anfitriones han ganado 15 de los anteriores 19 Juegos 7 de finales.
Ambos equipos llegan con un alto poder ofensivo, pero los antecedentes indican que en este tipo de partidos la puntuación suele bajar drásticamente. De hecho, desde 1988 ningún equipo ha superado los 100 puntos en un Juego 7 de la final. Los últimos cinco partidos de este tipo han sido encuentros cerrados y de baja anotación, lo que anticipa un duelo reñido este domingo.
Ni los Pacers ni el Thunder cuentan con jugadores que hayan disputado antes un séptimo partido de Finales de NBA, lo que añade un ingrediente de incertidumbre. Las estrellas Shai Gilgeous-Alexander y Tyrese Haliburton intentarán liderar a sus equipos hacia la gloria, mientras la expectativa aumenta por saber qué árbitros serán designados para este trascendental choque, que también será una novedad para parte del cuerpo arbitral.