El 2024 se cierra con un sombrío recuento de tragedias que dejaron luto en numerosas familias dominicanas. Entre los incidentes más impactantes destacan el incendio en el carnaval de Salcedo que cobró la vida de 10 niños, un siniestro en la penitenciaría de La Victoria con 13 fallecidos, y un accidente en Azua que dejó 10 muertos y 17 heridos. Estos eventos recuerdan la fragilidad de la vida y la necesidad de mayor prudencia y medidas de seguridad en actividades públicas y privadas.
El incendio en Salcedo, provocado por el uso inadecuado de fuegos artificiales, marcó el mes de marzo con una tragedia que afectó a niños de entre 5 y 16 años. Días después, un corto circuito en La Victoria causó otro devastador incendio, con víctimas cuya identificación fue un doloroso proceso para sus familiares. En septiembre, un camión sin control en Las Yayas de Azua terminó con la celebración de unas fiestas patronales, arrollando a decenas de personas y dejando un saldo de dolor y pérdidas irreparables.
Otro caso que mantuvo a la sociedad en vilo fue la muerte de Paula Escalante, encontrada sin vida en una zona franca en febrero. Aunque las investigaciones iniciales apuntaron a compañeros de trabajo, el caso fue archivado provisionalmente, dejando un velo de misterio que aún persiste. Estas tragedias no solo marcaron el calendario, sino que subrayan la importancia de exigir justicia y fortalecer la seguridad en todos los ámbitos.
