La Penitenciaría Nacional de La Victoria retomó la calma después del incendio ocurrido la noche del sábado pasado. Según informaron los familiares de los internos, también se registró un intento de motín en horas de la madrugada.
Como medida preventiva, se suspendieron las visitas y se informó a los familiares que no se permitiría la entrada a nadie. Sin embargo, se permitió entregar alimentos y ropa para los reclusos, y se anunció que el lunes podrían llevar alimentos nuevamente.
El incendio anterior en La Victoria dejó al menos 13 personas fallecidas, aunque solo tres han sido identificadas hasta el momento: Esteban Paredes Flores, Francis Michael Pérez y Gerald Davis Núñez González. Se cree que el fuego, que afectó las celdas 3 y 4 del patio del recinto carcelario, fue provocado por un cortocircuito.
La Procuraduría General de la República (PGR) ha instalado una comisión para investigar las causas del incendio y determinar las acciones a tomar con respecto al área afectada.
La Penitenciaría Nacional de La Victoria, construida durante la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo, es la prisión más poblada del país, albergando a 7,608 reclusos, aunque su capacidad es de solo 2,103, según un informe de la Oficina Nacional de Defensa Pública.
