
Una atmósfera de calma y reflexión ha predominado en los barrios más representativos del Gran Santo Domingo durante el asueto de Semana Santa. Sectores como San Carlos, Villa Juana, Villa Consuelo, María Auxiliadora y otros lucían poco transitados este Jueves Santo, con colmados operando a media capacidad y patrullajes policiales en cumplimiento con las restricciones emitidas por el Ministerio de Interior y Policía.
La reciente tragedia ocurrida en un centro nocturno ha influido significativamente en el ánimo de la población, motivando a muchos a pasar los días santos en casa, reflexionando o compartiendo en familia. Residentes como María Félix y Belkys Lora optaron por suspender planes de viaje y priorizar la tranquilidad. Otros, como Minelson Díaz, dedicaron el tiempo al ayuno y la oración, mientras que algunos colmaderos notaron una baja considerable en la afluencia habitual para estas fechas.
A pesar del luto, no todos detuvieron su rutina. Algunos trabajadores del entretenimiento aseguraron que continuarían sus labores durante el fin de semana. Sin embargo, se mantiene un consenso general en torno a la necesidad de prudencia. En lugares como Guachupita, la gente se mantuvo en sus sectores disfrutando del dominó, habichuelas con dulce y otras tradiciones, en un ambiente sereno y respetuoso.