
Ryan Reynolds y Hugh Jackman, junto al director Shawn Levy, dejaron claro en una reciente entrevista que no están dispuestos a ceder sus papeles como Deadpool y Wolverine, personajes que se han convertido en íconos culturales en América Latina y el mundo. Aunque reconocen que algún día podrían ser reemplazados, ambos actores expresaron, con el estilo característico de sus personajes, que no tienen planes inmediatos de despedirse de ellos. Reynolds, en tono humorístico, respondió que solo cedería su papel «sobre mi cadáver frío y con la mano trabada en el martillo», mientras que Jackman señaló que sería difícil imaginar a otro actor interpretando a Wolverine, aunque admitió curiosidad por ver qué aportaría alguien más al rol.
Shawn Levy, por su parte, recalcó que, para él, Reynolds y Jackman son esenciales para los personajes y que no imagina un futuro sin ellos. El director también reflexionó sobre la importancia de la experiencia cinematográfica colectiva, que ofrece una conexión emocional con la audiencia que no puede ser reemplazada por el streaming. En este sentido, tanto Reynolds como Levy destacaron el valor de las salas de cine como espacios únicos para vivir momentos compartidos que se transforman en recuerdos duraderos.
Mientras los fanáticos esperan con ansias la próxima entrega de Deadpool, los tres artistas continúan defendiendo el legado de estos personajes. Para ellos, lo más importante es la conexión emocional con el público, algo que aseguran sigue siendo la fuerza que impulsa el éxito de la franquicia en todo el mundo.