En una declaración reciente el presidente, Luis Abinader, hizo un llamado a los haitianos para que abandonen el proyecto de construcción de un canal en el río Masacre. Abinader expresó la disposición de su gobierno para discutir el asunto bajo los términos del Tratado de 1929, siempre y cuando los haitianos desistan de la construcción del canal de manera pacífica.
El mandatario afirmó que mientras persista la construcción del canal en el río Masacre, el gobierno dominicano continuará operando la bomba instalada en el canal de La Vigía para asegurar el suministro de agua a los agricultores locales. Esta medida se lleva a cabo en respuesta a la apertura del canal de trasvase construido por Haití, el cual desvía agua del río Masacre.
Abinader subrayó que el gobierno dominicano seguirá asumiendo el costo de las bombas necesarias para abastecer de agua a los agricultores y que, en las próximas dos semanas, se instalarán bombas eléctricas adicionales con este propósito.
La instalación del sistema de bombeo en La Aduana Vieja, en el río Dajabón o Masacre, se anunció el pasado 27 de marzo con el objetivo de garantizar el suministro de agua a los agricultores dominicanos a través del canal La Vigía.
El gobierno dominicano desplegó soldados del Ejército dominicano y del Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront) para proteger el sistema de bombeo, en respuesta a la construcción del canal por parte de los haitianos.
Por su parte, los productores agropecuarios de la región fronteriza de Dajabón respaldaron la medida del gobierno, asegurando que esto garantizará la seguridad de sus cosechas.
Las autoridades dominicanas han reiterado que el canal construido por Haití en el río Masacre se lleva a cabo de manera irregular y viola el artículo 10 del Tratado de Paz, Amistad Perpetua y Arbitraje de 1929, firmado por ambos países. Esta situación ha generado tensiones en la frontera, llegando incluso al cierre temporal de la misma.
