Este de la Liga Nacional: Bravos-Mets
Bueno, ésta no es precisamente una nueva rivalidad. Chipper Jones tiene un hijo llamado Shea, después de todo. Pero, con las disculpas a los Filis (quienes, por cierto, llegaron a la Serie Mundial del 2022), estos dos equipos están reforzados hasta los dientes para luchar cara a cara durante la próxima media década.
Los Bravos tienen un núcleo que está bajo contrato por los próximos años y que luce listo para impulsar a Atlanta a otra Serie Mundial en algún momento – y cuidado si no es más de una. De su parte, se puede decir que los Mets están bien motivados para hacer lo necesario para destronar a Atlanta en la división e intentar ganar su primer anillo de Serie Mundial desde 1986.
Como prueba de lo intensa que puede llegar a ser esta rivalidad, sólo vean lo ocurrido en la recta final de la campaña pasada, cuando los Bravos barrieron a los Mets para conquistar su quinto título divisional consecutivo. Y esto apenas está empezando.
Central de la Liga Nacional: Cerveceros-Cardenales
Si esto va a seguir siendo una rivalidad, los Cardenales van a tener que salir rápido del foso de la división. Pero presumiendo que eso pasará eventualmente, estos dos conjuntos deben de estar en una buena posición para seguir luchando de la misma manera en la que lo han hecho durante el último siglo.
El éxito de los Cardenales está bien documentado. Pero vale la pena recordar todos los dolores de cabeza que les han generado a los Cerveceros, desde el 2011 (uno de los mejores grupos que han tenido los Cerveceros en los últimos años, que terminó cayendo ante San Luis en la SCLN) hasta el año pasado, cuando Milwaukee se derrumbó después de salir de Josh Hader vía cambio.
Algo divertido sobre esta rivalidad es que ambos se enfrentaron en una ocasión en la Serie Mundial, en 1982 (la ganaron los Cardenales, claro).
Oeste de la Liga Nacional: Dodgers-Padres
Ésta tiene que ser la mejor rivalidad del momento, ¿no? Los Padres han estado bajo la sombra de sus vecinos californianos por toda una vida, pero algo parece estar cambiando ahora. San Diego ha sido bien agresivo en su intento por destronar a Los Ángeles con su misma receta, al adquirir prácticamente a todos los nombres importantes del mercado, desde los dominicanos Manny Machado y Juan José Soto hasta Xander Bogaerts.
Hasta ahora eso no ha funcionado en la temporada regular, pero durante la SDLN del año pasado, los Padres finalmente superaron la barrera. Estos dos conjuntos van a seguir golpeándose durante los próximos años. Nosotros sólo seremos afortunados de poder verlo.
