
El Ministerio Público, la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y Policía Nacional pusieron en marcha desde tempranas horas de este martes la “Operación Halcón IV”, en contra de varias organizaciones del crimen organizado, cuyos miembros son investigados por asesinatos y narcotráfico.
Entre los principales investigados figura Joel Ambioris Pimentel García (a) la J, presunto responsable de las amenazas dirigidas en contra de la Procuradora General de la República Dominicana Miriam Germán, semanas atrás.
Según ha trascendido, las autoridades comandadas por el director de la PN, Eduardo Alberto Then; el vicealmirante de la DNCD José Cabrera Ulloa; y la procuradora adjunta Yeni Berenice Reinoso, habrían coordinado operativos conjuntos en distintas zonas de Santiago de los caballeros con la intención de localizar a “La J”, señalado como líder una red delincuencial que opera y controla el sistema penitenciario dominicano.
Joel Ambioris Pimentel García (la J), a quien deportaron de Estados Unidos después de cumplir una pena por narcotráfico. Como dominicano viajó a Colombia y con identidad de colombiano a España, en donde hizo residencia como dominicano. Las investigaciones lo vinculan a decenas de muertes violentas en varias provincias del norte de República Dominicana.
Operación
Las fuerzas élites han penetrado a lugares considerados difíciles y han tomado el control de zonas que por años consideradas territorios dominados por algunas organizaciones criminales, como El Hoyo de Bartola, centro de operación del extraditable Joel Ambioris Pimentel García (la J).
La investigación ha encontrado evidencias de que varios miembros de las distintas organizaciones criminales se van a España, luego de cometer delitos de sangre o acciones de narcotráfico en República Dominicana.
En la mayoría de los casos salen del país a través de Colombia. Asimismo lo hacen por Estados Unidos, vía México, por lo que las autoridades dominicanas han establecido una estrecha colaboración con varios países a los que se ha suministrado información sobre los miembros de las organizaciones criminales que ingresaron a sus territorios.
Las autoridades han ocupado armas y dinero, así como cocaína, marihuana, entre otras evidencias de delitos en una operación que sigue en proceso.