
Kamala Harris, vicepresidenta de Estados Unidos y hija de inmigrantes, aseguró la nominación presidencial del Partido Demócrata, siendo la primera mujer no blanca en ser postulada a la presidencia por uno de los dos principales partidos. Tras el abrupto fin de la candidatura de Joe Biden, Harris consiguió rápidamente el apoyo de los delegados necesarios.
La votación se realizó de manera virtual durante cinco días, y el 99% de los delegados votaron a favor de Harris. La Convención Nacional Demócrata certificará formalmente la votación en Chicago este mes.
Encuestas recientes indican que Harris tiene una opinión favorable del 46% de los estadounidenses. Su campaña se centrará en temas como la democracia, la prevención de la violencia armada y el derecho al aborto, con un discurso firme respaldado por su experiencia como fiscal. Harris se enfrentará al expresidente Donald Trump, quien busca regresar al poder.