
Un trágico suceso conmociona a Francia tras la muerte de un adolescente de 15 años a causa de una brutal paliza, ocurrida a la salida de clases en la localidad de Viry-Châtillon, a las afueras de París. El presidente Emmanuel Macron ha llamado a proteger las escuelas como un «santuario» ante la creciente violencia entre jóvenes.
El incidente, que tuvo lugar el jueves, ha suscitado una profunda consternación en la sociedad francesa. Macron, durante una visita a un centro escolar en París, expresó su repudio ante este acto de «violencia desinhibida» y aseguró que la sociedad no cederá ante tales crímenes.
La líder ultraderechista Marine Le Pen se sumó a las críticas, denunciando el «asalvajamiento que corroe la sociedad» y presionando al gobierno de Macron para que tome medidas más enérgicas en materia de seguridad.
El joven fallecido, identificado como Shamseddine, era descrito por sus compañeros como una persona amigable y sin problemas. La agresión ocurrió cerca de la escuela Les Sablons, donde estudiaba la víctima, y se presume que varios individuos lo atacaron violentamente en el vestíbulo de un edificio.
La justicia ha iniciado una investigación por asesinato, y hasta el momento cuatro menores y un adulto han sido detenidos en relación con el caso.
Este trágico incidente se suma a otros recientes episodios de violencia juvenil en Francia, como el ataque contra una chica de 14 años en Montpellier y la agresión a otra adolescente en Tours. La lucha contra el acoso escolar se ha convertido en una prioridad para el gobierno, que busca reforzar la autoridad en las escuelas y garantizar un ambiente seguro para todos los estudiantes.