
Miles de haitianos, afectados por la escasez de alimentos en su país, abarrotaron el mercado binacional de Dajabón en busca de productos diversos. El flujo masivo de compradores y vendedores extranjeros fue supervisado por el Ejército y el Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront), evidenciando la colaboración para mantener el orden.
A pesar de la multitud, el presidente de la empresa distribuidora KARDISA, Héctor Quideres Taveras, destacó la organización en el intercambio comercial. Quideres expresó la necesidad de paz en la frontera para facilitar los negocios entre haitianos y dominicanos.
Las autoridades militares dominicanas han implementado medidas para mantener el control ante el aumento de extranjeros. El gobierno haitiano aún no ha recolocado el portón derribado por civiles haitianos, y se espera que se reinstale en los próximos días, según fuentes.
El control biométrico del Gobierno dominicano para ingresar al país no generó incidentes esta vez, a diferencia de días pasados. El flujo masivo de haitianos se intensificó, con residentes en la República Dominicana trasladándose a la zona para pasar las fiestas navideñas en su país. La situación refleja la esperanza de que la libre operación comercial entre Haití y República Dominicana continúe sin mayores problemas.