
El reiteró su compromiso con la construcción del controvertido canal en el río Masacre, que sirve de frontera natural con la República Dominicana, a pesar de la creciente crisis diplomática con su vecino caribeño.
En un comunicado emitido este jueves, el Ministerio de Agricultura de Haití enfatizó que el canal debe continuar su desarrollo y expresó su respaldo a las obras. Esto se produce en medio de la tensión con la República Dominicana, que, como medida de represalia, ha cerrado completamente sus fronteras con Haití y ha tomado otras medidas restrictivas.
El comunicado del Ministerio de Agricultura afirmó: «Sí, el canal debe construirse. Sí, hay que esforzarse para que el agua llegue a los canales como es debido. Sí, es a través de la solidaridad y la unidad como puede regarse la tierra de (la llanura de) Maribahoux».
Además, se subraya que el ministerio respalda la construcción del canal con el objetivo de garantizar que se cumplan las normas técnicas y que no afecte negativamente a la vida de las personas y las plantaciones en la llanura de Maribahoux.
El Ministerio de Agricultura también desmintió los rumores sobre la supuesta existencia de un documento secreto compartido con la República Dominicana que respaldaría la posición de este país con respecto al canal. El departamento haitiano consideró que esos rumores carecen de fundamento y reafirmó su compromiso en defensa de los agricultores de la llanura de Maribahoux.
El comunicado del Ministerio destaca que han llevado a cabo gestiones a través de la Dirección Departamental del Noreste para acompañar las obras de construcción del canal, tal como se solicitó en una declaración gubernamental emitida el 13 de septiembre.
El Gobierno dominicano argumenta que la construcción del canal en el lado haitiano del río viola el Tratado de Paz, Amistad y Arbitraje de 1929 y el Protocolo de Revisión de 1936, que prohíben la realización de obras que puedan modificar el curso de los ríos o alterar el suministro de agua de las fuentes compartidas por ambas naciones. La situación ha llevado a una serie de medidas restrictivas y al cierre de fronteras por parte de la República Dominicana en respuesta a la controversia en curso.