
El gobierno dominicano ha activado protocolos de prevención debido a la amenaza del huracán Beryl, de categoría 4, que aunque no está proyectado a impactar directamente el país, podría generar lluvias significativas y vientos en algunas regiones.
El presidente Luis Abinader, quien hizo el anuncio durante una rueda de prensa en el Palacio Nacional, subrayó que las medidas están dirigidas principalmente a «salvar vidas». Las acciones se enfocarán en las zonas más vulnerables, en coordinación con entidades gubernamentales como el Ministerio de Defensa, la Policía Nacional y la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD).
Abinader destacó que Beryl podría afectar especialmente las provincias de Barahona y Pedernales con lluvias y vientos fuertes. Aunque el huracán no se espera que golpee directamente el país, el mandatario insistió en la importancia de estar preparados ante cualquier cambio en su trayectoria.
La directora de la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet), Gloria Ceballos, explicó que el huracán pasará a unos 300 kilómetros al sur del territorio dominicano, pero su amplio campo nuboso podría generar lluvias significativas en la región sur, la cordillera Central y la región noreste.
El Centro de Operaciones de Emergencias (COE) ha emitido alertas para diez provincias: cinco en alerta amarilla (Pedernales, Barahona, Peravia, Azua y San Cristóbal) y cinco en alerta verde (Santo Domingo, San Pedro de Macorís, La Romana, La Altagracia y el Distrito Nacional). Se recomienda a la población mantenerse alejada de las costas y seguir las instrucciones del COE para evitar riesgos.
Además, los ayuntamientos del Gran Santo Domingo han activado planes de contingencia, que incluyen la limpieza de imbornales y filtrantes en áreas críticas, la recogida de desechos sólidos y la limpieza de cañadas. La Alcaldía del Distrito Nacional ha dispuesto de más de 700 bomberos y voluntarios para responder a cualquier emergencia.
Estas medidas de precaución buscan minimizar los posibles impactos del huracán y garantizar la seguridad de la población dominicana.