
La frontera entre República Dominicana y Haití en la localidad de Dajabón amaneció cerrada debido a la decisión tomada por el presidente Luis Abinader, quien impartió instrucciones al Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza (Cesfront) para implementar el cierre.
El cierre de la frontera ha dejado varados a una gran cantidad de furgones y camiones cargados de mercancías, así como al autobús de Caribe Tours, que transporta pasajeros entre ciudades haitianas y dominicanas. Todas las puertas de acceso, incluida la que conduce al mercado binacional, permanecen cerradas y bajo fuerte vigilancia militar.
Las autoridades locales han confirmado que recibieron la orden de cerrar la frontera hasta nuevo aviso. Sin embargo, a los periodistas no se les permite acercarse al portón fronterizo, lo que ha generado limitaciones en la cobertura de la situación.
Este cierre de la frontera ocurre en medio de tensiones bilaterales y preocupaciones de seguridad. El presidente Abinader advirtió previamente que tomaría medidas si fuera necesario para proteger los intereses y la seguridad de la República Dominicana. Esta decisión también se produce después de un reciente incidente en el que una familia dominicana fue presuntamente asesinada por individuos haitianos y declaraciones del alcalde de Dajabón sobre la entrada de bandas haitianas para cometer delitos en la provincia.
Además, el presidente Abinader ha expresado su preocupación por el reinicio de la construcción de un canal destinado a desviar agua desde el río Masacre hacia Haití, y el Gobierno dominicano ha solicitado a las autoridades haitianas que detengan esta actividad de inmediato.
El cierre de la frontera en Dajabón es un desarrollo importante que tendrá un impacto en el comercio y la movilidad entre ambos países, y se espera que las autoridades den a conocer más detalles sobre esta medida en las próximas horas.