
Una creciente tensión se vive en el Palacio de Justicia de Ciudad Nueva mientras se espera que el Ministerio Público deposite la solicitud de medida de coerción contra Antonio y Maribel Espaillat, vinculados a la tragedia ocurrida en la discoteca Jet Set el pasado 8 de abril. Ambos fueron detenidos el jueves tras ser interrogados por las autoridades y son señalados por supuesta negligencia que habría contribuido al colapso del techo del centro nocturno, hecho que dejó 236 muertos y más de 180 heridos.
El Ministerio Público investiga a los hermanos por homicidio involuntario y por presuntos intentos de intimidación a empleados que podrían testificar en su contra. Uno de esos trabajadores reveló que advirtió a los propietarios del estado crítico de la infraestructura antes del evento que encabezó el merenguero Rubby Pérez. Además, el acceso al celular del denunciante permitió recuperar conversaciones comprometedoras. El informe preliminar de la Oficina Nacional de Evaluación Sísmica ya fue entregado a la Procuraduría.
Mientras tanto, se supo que Maribel Espaillat fue trasladada a un centro de salud tras presentar complicaciones durante su reclusión. La expectativa crece en el recinto judicial, donde decenas de periodistas y ciudadanos esperan una decisión sobre los próximos pasos judiciales. La última paciente internada tras el colapso, Jennifer Tavera, fue dada de alta este jueves tras permanecer más de dos meses hospitalizada.