La embajada de Cuba en Washington fue objeto de un ataque con bombas incendiarias el pasado domingo por la noche, según informó el canciller cubano, Bruno Rodríguez. Afortunadamente, no se reportaron daños al personal que trabaja en la sede diplomática, como señaló Rodríguez en su cuenta oficial de la red social X.
El atentado parece haber ocurrido poco después de que el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, regresara a la isla después de una visita a Nueva York, donde participó en la Asamblea General de las Naciones Unidas y se reunió con grupos de cubanos residentes y simpatizantes. El líder cubano fue recibido en La Habana por el ex presidente Raúl Castro.
El canciller Bruno Rodríguez destacó que este ataque con bombas incendiarias es el segundo acto violento que afecta a la embajada de Cuba en Washington, recordando un incidente similar ocurrido en 2020, cuando un individuo armado con un fusil atacó el edificio. En ese caso, el responsable, un ciudadano estadounidense de ascendencia cubana, fue identificado y detenido.
Rodríguez enfatizó que los grupos anticubanos recurren al terrorismo al sentir impunidad, una preocupación que Cuba ha transmitido repetidamente a las autoridades estadounidenses. Hasta el momento, no se han proporcionado detalles adicionales sobre los posibles daños causados al edificio en este último ataque, ni se ha informado sobre la detención de algún sospechoso.
Cuba y Estados Unidos reabrieron sus embajadas en 2015, marcando un hito en la normalización de las relaciones bilaterales después de más de cinco décadas de hostilidades. Sin embargo, las relaciones se deterioraron nuevamente durante la presidencia de Donald Trump, aunque las sedes diplomáticas no fueron cerradas. El presidente actual, Joe Biden, no revirtió muchas de las medidas de endurecimiento de las sanciones implementadas por su predecesor, incluyendo la inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo.
