La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) presentó sus nuevas proyecciones de crecimiento para la región, destacando que República Dominicana cerraría el año 2023 con un crecimiento del 3.1% en su Producto Interno Bruto (PIB), esperándose un aumento al 4.1% para el año 2024. La presentación, realizada por José Manuel Salazar-Xirinachs, secretario ejecutivo de la Cepal, reveló preocupaciones sobre la baja senda de crecimiento en la región para el próximo año.
El informe resalta que la desaceleración económica afectará el empleo y aumentará los niveles de informalidad laboral. Todas las economías latinoamericanas mostrarán un menor crecimiento en 2023 en comparación con el año anterior, reflejando una caída en la tasa de crecimiento tendencial del PIB regional.
Ante estos desafíos, la Cepal destaca la necesidad de implementar políticas macroeconómicas que impulsen la inversión, creando resiliencia ante el cambio climático y fortaleciendo la capacidad de crecimiento. Se sugiere enfocarse en sectores estratégicos, promover la inversión pública y privada, ampliar el espacio fiscal y monetario, y aplicar reformas financiera y tributaria internacional para respaldar la movilización de recursos.
El balance para 2023 estima una variación anual del PIB regional en un 2.2%, con América del Sur creciendo un 1.5%, Centroamérica y México un 3.5%, y el Caribe (sin incluir Guyana) un 3.4%. Para 2024, se proyecta un crecimiento del 1.9% en la región, manteniendo la dinámica de bajo crecimiento.
República Dominicana destaca con un pronóstico del 4.1% para 2024, junto con Panamá (4.2%), Paraguay (4.0%), Uruguay (3.8%), y Costa Rica (3.8%). La Cepal también identifica sectores impulsores para el crecimiento sostenible, incluyendo la transición energética, electromovilidad, economía circular, bioeconomía, entre otros.
