La Corte Suprema de Estados Unidos expresó escepticismo sobre la reclamación de inmunidad presidencial absoluta por parte de Donald Trump, lo que podría retrasar aún más su juicio por presunta interferencia electoral. La sentencia, que se espera para finales de junio, podría tener implicaciones significativas para el poder ejecutivo y los problemas legales del exmandatario.
El tribunal, al aceptar el caso, ya ha retrasado el inicio del juicio contra Trump, quien enfrenta acusaciones de conspirar para alterar los resultados de las elecciones de 2020. Aunque la mayoría de los jueces parecen inclinados a no respaldar la afirmación de Trump, algunos expresaron dudas sobre la decisión de un tribunal inferior que negó la «inmunidad absoluta» a los expresidentes.
Una posible sentencia adversa a Trump podría retrasar el juicio hasta después de las elecciones de noviembre, donde se enfrentaría nuevamente al demócrata Joe Biden. Esto genera incertidumbre sobre el futuro legal del expresidente, quien enfrenta múltiples acusaciones relacionadas con su gestión.
Trump, por su parte, expresó su disgusto por no poder asistir a la audiencia en la Corte Suprema y criticó la idea de la inmunidad presidencial, argumentando que sin ella, el presidente se convierte en un mero ceremonial. Mientras tanto, continúa enfrentando cargos en varios estados por presuntas irregularidades durante su mandato y las elecciones de 2020.
