La combinación de altas temperaturas, lluvias y la presencia del polvo del Sahara está generando un aumento significativo en procesos virales y enfermedades respiratorias en el país. Según el virólogo Robert Paulino, estas condiciones son propicias para el incremento de casos de conjuntivitis, dengue y la exacerbación de asma y complicaciones cardíacas.
Paulino recomienda a la población tomar medidas preventivas como el uso de ropa ligera, aplicación de repelentes contra mosquitos, mantener una buena higiene de manos y limpiar los entornos. Además, sugiere realizar actividades físicas temprano en la mañana o al atardecer para evitar el calor extremo.
El especialista destaca que el uso de ropa fresca para mitigar el calor, aunque necesario, aumenta la exposición a picaduras de mosquitos, por lo que el uso de repelentes es crucial. También advierte que el polvo del Sahara puede agravar condiciones respiratorias, especialmente en personas con asma, enfermedades crónicas obstructivas y antecedentes de tabaquismo.
«Los efectos del polvo del Sahara están asociados a un incremento en las manifestaciones respiratorias, especialmente aquellas desencadenadas por procesos alérgicos,» concluyó Paulino.
