Este lunes marcará un hito en la historia política de Estados Unidos con la ceremonia de investidura de Donald Trump y su vicepresidente J.D. Vance. En un cambio inusual debido a las gélidas temperaturas, el evento se llevará a cabo dentro del Capitolio en lugar de las tradicionales escalinatas. Este movimiento busca proteger a los asistentes de temperaturas que podrían alcanzar hasta -12°C, un contraste significativo con el asalto ocurrido hace cuatro años en el mismo edificio durante la certificación de la victoria de Joe Biden.
El cronograma incluye la investidura al mediodía seguida por un discurso de Trump, seguido por la despedida del presidente saliente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris. Excepcionalmente, la ceremonia será retransmitida en el Capital One Arena, adaptándose a su capacidad para unas 20,000 personas. Trump planea unirse al público después de jurar el cargo, continuando con galas y fiestas en la ciudad durante la noche.
Las medidas de seguridad son extraordinarias, con 25,000 policías y militares desplegados, 48 km de barreras y medidas adicionales como francotiradores y drones, reflejando un ambiente tenso tras una campaña electoral marcada por la violencia. Este evento culminará con una ceremonia en la catedral nacional el martes, cerrando un capítulo significativo en la historia política estadounidense.
