
En República Dominicana se reportan alrededor de 4,000 nuevas infecciones por VIH cada año, según datos compartidos por autoridades de salud y organizaciones especializadas. Para el año 2023 se documentaron 3,900 nuevos casos, elevando a más de 78 mil las personas diagnosticadas con el virus en el país. De ellas, unas 55 mil están activas en tratamiento antirretroviral y cerca de 49 mil han alcanzado supresión viral, lo que significa que tienen una carga tan baja del virus que no pueden transmitirlo.
Los datos también revelan que la mayoría de los diagnósticos en mujeres ocurre entre los 35 y 39 años, mientras que en hombres la incidencia se concentra entre los 45 y 49. Del total de personas diagnosticadas, más de 21 mil son de nacionalidad haitiana, y casi 450 son venezolanos, lo que evidencia la dimensión binacional del reto sanitario. El mayor desafío, sin embargo, sigue siendo mantener a los pacientes constantes en su tratamiento, clave para controlar la enfermedad y evitar nuevas infecciones.
Aunque las muertes por VIH han disminuido de forma significativa en los últimos años, gracias al acceso a tratamientos antirretrovirales, aún se registran fallecimientos, sobre todo cuando los pacientes llegan en estado avanzado o tienen coinfecciones como la tuberculosis. Expertos destacan que el país necesita mejorar la precisión en la identificación de causas de muerte, debido a la limitada cantidad de autopsias realizadas, pero insisten en que los avances en cobertura y adherencia al tratamiento han sido cruciales para reducir la mortalidad.