La boxeadora italiana Angela Carini abandonó su combate en los Juegos Olímpicos de París tras solo 47 segundos debido a dudas sobre el género de su rival, la argelina Imane Khelif. Carini, una de las favoritas, dejó el ring en medio de lágrimas y sin darle la mano a Khelif, alegando que los golpes recibidos la dejaron sin aliento.
El entrenador de Carini, Emanuele Renzini, evitó profundizar en el tema, mientras que la Asociación Internacional de Boxeo (IBA) había previamente excluido a Khelif del Mundial de Nueva Delhi en 2023 por no cumplir con criterios de elegibilidad basados en estudios biológicos. A pesar de esto, el Comité Olímpico Internacional (COI) permitió a Khelif competir en París, afirmando que cumplía con sus criterios.
Este caso ha generado controversia y críticas sobre la falta de criterios claros y uniformes en competencias internacionales. Autoridades italianas y el Comité Olímpico Argelino (COA) han expresado sus posturas, destacando la necesidad de proteger la integridad y dignidad de los atletas.
