Nacionales

Once años después, el modelo de Nuevo Boca de Cachón se desmorona entre abandono y carencias

El distrito municipal de Nuevo Boca de Cachón, en la provincia Independencia, fue concebido como un proyecto modelo para reubicar a las familias afectadas por la crecida del lago Enriquillo. Once años después de su inauguración, la comunidad enfrenta un marcado deterioro en su calidad de vida, con infraestructuras colapsadas, servicios básicos deficientes y un sentimiento generalizado de abandono.

Las calles están plagadas de alcantarillas destapadas, drenajes pluviales colapsados y aguas residuales que, durante la temporada de lluvias, invaden espacios públicos y representan una amenaza a la salud de sus 3,680 habitantes. El centro de salud carece de ambulancia funcional y el cuerpo de bomberos opera con lo mínimo, sin herramientas esenciales para emergencias. La estación policial apenas cuenta con una oficial raso, sin recursos tecnológicos ni vehículos propios para patrullar.

A pesar de contar con algunos servicios en funcionamiento, como la recogida de basura y centros educativos, los residentes expresan frustración por la falta de inversión sostenida. Agricultores claman por un sistema de riego mal ejecutado, mientras negocios informales surgen en viviendas modificadas ante la escasez de empleo. El pueblo que alguna vez se presentó como ejemplo de desarrollo rural planificado, hoy lucha por no ser olvidado.

Artículos Relacionados

Botón volver arriba
error: Este contenido esta protegido !!