
Estados Unidos ha puesto en pausa la asistencia financiera de 10.8 millones de dólares destinada a República Dominicana a través de la Agencia Internacional para el Desarrollo (USAID). Según la vocera de la Embajada estadounidense en Santo Domingo, Michelle Angulo, la medida responde a la orden ejecutiva que busca revisar y realinear la ayuda exterior bajo la política de «America First».
El fondo estaba destinado a la reforma del sistema eléctrico nacional, incluyendo el fortalecimiento de la resiliencia energética y la capacitación en ciberseguridad. Sin embargo, el Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (CUED) asegura no haber recibido los recursos. Su presidente, Celso Marranzini, ha expresado desconocer el paradero del financiamiento, lo que ha generado preocupación sobre la transparencia y el destino de estos fondos.
La decisión de EE.UU. implica una revisión general de la cooperación financiera otorgada a distintos países. Mientras tanto, en República Dominicana, persisten las interrogantes sobre el impacto que esta medida tendrá en los proyectos de modernización del sector eléctrico.