
Kim Kardashian ha pedido públicamente la reconsideración de las sentencias de cadena perpetua impuestas a los hermanos Erik y Lyle Menéndez, quienes fueron condenados por asesinar a sus padres en 1989. En un ensayo publicado en NBC News, Kardashian argumenta que el primer juicio fue injusto, ya que no se presentaron pruebas sobre los abusos que los hermanos sufrieron por parte de sus padres, José y Kitty Menéndez.
La empresaria señaló que las experiencias vividas por los hermanos fueron desestimadas y ridiculizadas por los medios de comunicación, y aseguró que Erik y Lyle no son los «monstruos» que se mostraron en aquel entonces. Kardashian mencionó que, tras pasar tiempo con ellos, ha podido constatar su buen comportamiento en prisión. La reciente serie «Monsters» de Netflix ha vuelto a poner el caso en el centro de la atención mediática.