
Los casos de malaria en la República Dominicana se han triplicado, principalmente debido a dos brotes activos en las provincias de San Juan y Azua, asociados a la migración de trabajadores haitianos. Según el boletín epidemiológico 23 de la Dirección Nacional de Epidemiología, hasta la semana 23 se han registrado 440 casos acumulados de malaria, comparado con solo 120 casos en el mismo periodo del año anterior, lo que representa un incremento de 320 casos, es decir, un 266.6%.
El doctor Ronald Skewes, director de epidemiología del Ministerio de Salud Pública, informó que la mayoría de los casos provienen de trabajadores migrantes que laboran en la cosecha de tomate, habichuelas y otros cultivos en las zonas afectadas. Del total de casos, 290 corresponden a Azua y 118 a San Juan.
El boletín indica que todos los casos confirmados están vivos y que la mediana de edad de los afectados es de 25 años, con un rango de 9 meses a 84 años. El 72.3% de los infectados son hombres.
La malaria, o paludismo, es transmitida por un parásito a través de la picadura de mosquitos. Los síntomas incluyen fiebre, escalofríos, dolor de cabeza, dolor muscular y cansancio, y debe ser tratada a tiempo para evitar complicaciones graves.
El doctor Skewes enfatizó la importancia de la prevención, que incluye la eliminación de criaderos de mosquitos, mantener el agua tapada y evitar acumulaciones de agua en floreros, macetas y neumáticos viejos.