
El renombrado director de animación japonés, Hayao Miyazaki, aún no está listo para retirarse después de haber ganado su segundo premio Oscar por la película «Kimitachi wa dô ikiru ka» («El niño y la garza»). A sus 83 años, Miyazaki se convierte en el director de mayor edad en ser nominado y galardonado en la categoría de largometraje animado.
El estudio Ghibli, detrás de la aclamada película, no ha revelado sus planes futuros, pero Miyazaki no descarta la posibilidad de hacer otra película. Según personas cercanas al cineasta, se siente arrepentido por haber anunciado su retiro hace una década debido a su edad.
La victoria en los Oscar fue celebrada con entusiasmo en el modesto edificio del estudio de animación en las afueras de Tokio, donde se congregaron medios de comunicación para presenciar el evento en una pantalla gigante. Esta es la segunda vez que Ghibli se alza con el premio de la Academia, habiendo ganado previamente en 2003 por «Sen to Chihiro no kamikakushi» («El viaje de Chihiro»).
Los medios japoneses elogiaron las películas de Ghibli y el logro de «Godzilla Minus One» en la categoría de mejores efectos visuales, marcando la primera victoria de Japón en esa área. Esta doble victoria en los Oscar para Japón no ocurría desde 2009, lo que ha sido destacado como un hito en la historia del cine japonés.
Aunque Miyazaki no asistió a la ceremonia, prefiriendo celebrar en privado en su taller, su legado y contribución al cine de animación continúan siendo celebrados tanto en Japón como a nivel internacional. El estudio Ghibli, conocido por su enfoque en la animación dibujada a mano, sigue siendo una influencia significativa en la industria del cine.